SESPAS publica el informe técnico “Cambio climático y salud: una visión iberoamericana”

REFORZAR LA SALUD PÚBLICA ES IMPRESCINDIBLE PARA HACER FRENTE AL RETO DEL CAMBIO CLIMÁTICO

• El cambio climático es un problema de salud pública cada vez más visible, no porque se generen nuevas enfermedades, sino porque se agravan y expanden geográficamente las ya existentes.

• La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que, entre 2030 y 2050, el cambio climático causará 250.000 muertes adicionales por año debido a la desnutrición, la malaria y la diarrea, fenómenos meteorológicos extremos, aumento de zoonosis y otros problemas, incluidos los de salud mental.

Madrid. 27 de diciembre. La Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS), en colaboración con la Sociedad Iberoamericana de Salud Ambiental (SIBSA), ha elaborado el documento “Cambio climático y salud: una visión iberoamericana”, donde 41 expertos ofrecen, a lo largo de 16 temas, una amplia visión del reto del cambio climático.

En este Informe técnico se exhorta a los tomadores de decisiones a controlar las emisiones de contaminantes relacionados con el cambio climático, lo que repercutiría en beneficios a corto y a largo plazo sobre la salud de la población.

Se reconoce que el cambio climático está relacionado con la disminución del rendimiento y calidad de los cultivos, amenaza los recursos pesqueros y ganaderos, crea inestabilidad en los precios y acceso a los alimentos y produce riesgos relacionados con la inocuidad alimentaria. No obstante, existe margen para la adaptación siempre que vaya acompañada de medidas efectivas de mitigación de emisiones.

Se dispone de evidencias que ponen de manifiesto las asociaciones entre el cambio climático y los trastornos mentales en la población. Estos trastornos afectan principalmente a las poblaciones más vulnerables. En consecuencia, se recomienda que las políticas, planes y programas ambientales sean sensibles al impacto en la salud mental, incorporando intervenciones de carácter económico y sociosanitario, tanto en España como a nivel mundial.

Por todo ello, se pide que los sistemas de salud estén preparados para hacer frente al previsible incremento en la incidencia y expansión de las enfermedades vectoriales y zoonosis, así como a la posible aparición de pandemias, en particular en los territorios y sociedades más vulnerables. No se debe olvidar el origen zoonótico de la actual pandemia de COVID-19.

Por último, y a pesar de todas estas evidencias, resulta especialmente desolador comprobar la pérdida paulatina de peso de las estructuras de salud pública y de sanidad ambiental, estructuras que están llamadas a ser las verdaderas protagonistas en el diseño y desarrollo de las líneas de acción y defensa de las estrategias de adaptación al cambio climático.

Con este Informe técnico, SESPAS y SIBSA han pretendido romper barreras geográficas, ampliar horizontes, acercarnos y compartir experiencias; en suma, unir intereses para reforzar la función de la salud pública frente a este reto global del cambio climático.