La pandemia de la COVID-19 ha puesto de manifiesto las debilidades y deficiencias sistémicas de los sistemas sanitarios de todo el mundo. Recientemente, la crisis ha superado un hito devastador, ya que más de 2,3 millones de personas han muerto a causa de la COVID-19. Muchos países todavía no están siguiendo la evidencia. Es necesario compartir la información para informar sobre las mejores prácticas y ayudar a los países a reorientar sus estrategias de salud pública. Nuestra responsabilidad como profesionales de la salud pública y científicos es compartir conocimientos y encausar la toma de decisiones a nivel político, clínico, de gestión y científico de acuerdo con la evidencia. Cuando este intercambio falla, los países cometen los mismos errores una y otra vez. La lucha contra la COVID-19 no se superará a menos que trabajemos juntos a una escala mayor. Debemos conseguir que todos los países den lo mejor de sí mismos y hacer realidad la colaboración transnacional.

Frente a uno de los mayores desafíos mundiales, el personal de salud pública ha surgido empoderado para librar su propia guerra contra la desinformación y la inequidad generalizadas. A medida que la pandemia se agrava en muchas regiones del mundo, es fundamental que este movimiento de salud pública no sólo se mantenga, sino que se fortalezca para coordinar una respuesta concertada para hacer frente a la COVID-19. Por estas razones y a través de una nueva declaración, la Federación Mundial de Asociaciones de Salud Pública (WFPHA, en sus siglas en inglés), la Alianza de Asociaciones de Salud Pública de las Américas, la Asociación Europea de Salud Pública, la Federación Africana de Asociaciones de Salud Pública y la Oficina Regional de Enlace de Asia y el Pacífico hacen un llamamiento a las sociedades regionales y a las asociaciones nacionales de salud pública para que vuelvan a hacer hincapié en su compromiso de colaboración y sigan reforzando las asociaciones mundiales. Los conocimientos de otros países deben ser fácilmente accesibles para que puedan aprovecharse al máximo. Si nos aseguramos de que cada nación adopta los más altos estándares de práctica de salud pública, podremos unirnos y vencer esta pandemia. Sin este discurso, es de temer que muchos países carezcan de los conocimientos y recursos necesarios para superar la pandemia

En este esfuerzo, la WFPHA y las asociaciones regionales de salud pública se comprometen a crear nuevos foros y oportunidades de debate transnacional. Además, las plataformas en línea pueden consolidarse para centralizar y organizar información importante. Las diferentes regiones tienen factores culturales y específicos del contexto que influyen en la toma de decisiones; es fundamental que las asociaciones aprecien estas diferencias y ofrezcan apoyo a estos países en su respuesta a la COVID-19. Ha llegado el momento de una colaboración eficaz. Al inspirar la unidad entre las asociaciones de salud pública, podemos asegurar que las regiones más afectadas por la pandemia estén equipadas para desarrollar políticas e intervenciones apropiadas.

Collaboration Statement Finalized
Last modified: 11 de marzo de 2021
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